lunes, 30 de enero de 2012

Bienvenido a mi mundo.

Bienvenido al mundo de la destrucción y el horror, donde los derechos humanos fueron hace ya tiempo olvidados y donde solo importa el papel y el metal, el dinero. Bienvenido al mundo donde la libertad es un lejano recuerdo y donde la igualdad quedó abandonada junto a los valores de la razón y la alegría. Bienvenido al mundo donde nuestra opinión no sirve de nada, donde vemos a los nuestros dormir en la calle y no hacemos nada, gente que se ve obligada a buscar en la basura y otra que por eso les miran mal por ello, no todo el mundo es capaz de cambiar su estrella y nadie puede elegir la situación que le toca vivir, es momento de actuar y reaccionar, de darnos cuenta que nuestro mundo cambia a peor. En mi mundo y en estos tiempos se le da más importancia a la creación de armas y avances militares que a las propias personas que viven en países subdesarrollados y parece que no se quieren dar cuenta que esa gente está muriendo debido a su situación, piénsalo, ¿qué es primordial? Gastar el capital en algo para crear la muerte o salvar la vida a personas cuyo pecado es nacer en una tierra pobre por culpa del ser humano. Por esto y mucho más bienvenido al mundo de la injusticia, la avaricia.

Largo hace ya que pienso en esto y.... ¿realmente merece la pena seguir aquí?

Libertad... igualdad... dulce ironía del pasado.

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